Este lunes 23 de enero, Samsung ha celebrado una rueda de prensa celebrada en Seúl, Corea, en la que ha hecho públicos los resultados de las investigaciones en torno a los incidentes ocurridos en su modelo Galaxy Note7, así como las medidas adoptadas por la compañía para evitar que puedan volver a producirse.

A las 2.00 a.m, hora local Europa Central, el equipo directivo de Samsung junto a expertos independientes han expuesto los resultados que han proporcionado los análisis de las empresas TÜV Rheinland, Exponent y UL sobre cientos de miles de terminales.

La investigación concluye que tanto el manejo, transporte y montaje de la baterías fueron correctos. El problema resulta de un defecto de fabricación de las baterías de uno de los fabricantes elegidos por Samsung (de hecho, una de sus propias divisiones).

Deformación fortuita

En una de las esquinas de la batería se producía una deformación fortuita, que terminaba por doblar las diferentes láminas conductoras positiva y negativa, hasta el punto en que se tocaban, cortocircuitando así los polos. Esto producía un calentamiento de las celdas y la consiguiente generación de gases al evaporarse los electrolitos internos, lo que conducía a las deflagraciones.

Otra causa adicional, fue la falta de una de las capas de aislante entre las láminas de parte de las baterías, lo que conducía al mismo escenario. Finalmente, una soldadura poco cuidadosa de las láminas de conexión del polo positivo resultaba en pequeñísimos bultos afilados que, con la normal expansión y contracción de las celdas durante la carga y descarga, acaban por perforar el aislante y causaban también el mencionado cortocircuito.

Aunque el problema inicial fue el daño no intencionado a las esquinas de las baterías durante la fabricación por parte de Samsung, las prisas por sustituir las baterías afectadas con modelos producidos por el otro fabricante de baterías para Note 7 provocó los demás defectos.

Además de ofrecer estas explicaciones, DJ Koh, presidente de la Unidad de Negocio de Comunicaciones Móviles de Samsung Electronics, expresó también sus sinceras disculpas y gratitud hacia los usuarios del Galaxy Note7, las operadoras móviles, los partners comercializadores y distribuidores y los socios de negocio por su paciencia y apoyo incondicional.

Durante esta rueda de prensa, Koh estuvo acompañado por Sajeev Jesudas (presidente de la división de Consumo de UL), Kevin White (doctor investigador principal de Exponent) y Holger Kunz (vicepresidente ejecutivo de Productos de TUV Rheinland AG).

Grupo asesor de baterías

Los portavoces anunciaron, además,  las nuevas medidas que ha adoptado Samsung para responder a este tipo de situaciones. Como lecciones aprendidas, la multinacional coreana ha implementado una amplia variedad de procesos internos de calidad, incluyendo protocolos adicionales como las medidas de seguridad en múltiples capas y la comprobación de la seguridad de las baterías en ocho puntos. Samsung ha creado también un grupo asesor de Baterías, formado por asesores externos, expertos académicos e investigadores, para garantizar que mantiene una perspectiva clara y objetiva sobre la seguridad y la innovación relativa a este tema.

Galaxy Note7: What We Discovered

Los resultados de la investigación que se hecho públicos por parte del equipo directivo de Samsung concluye que tanto el manejo, transporte y montaje de la baterías fueron correctos. El problema resulta de un defecto de fabricación de las baterías de uno de los fabricantes elegidos por Samsung (de hecho, una de sus propias divisiones).