
En los últimos cuatro años, organizaciones de todos los sectores y tamaños han podido comprobar cómo el cloud computing se ha convertido en un nuevo paradigma tecnológico y de negocio clave para el éxito empresarial. Este innovador modelo tecnológico y de negocio está entrando en una segunda oleada de adopción que proporciona mayores beneficios empresariales, entre los que se incluye el incremento de ingresos, aunque la mayoría de las organizaciones aún deben adoptar estrategias más avanzadas.
Según el quinto informe anual Cloud Index de Cisco, el tráfico cloud global se multiplicará por cuatro en los próximos cinco años, y alcanzará un total de 8,6 zettabytes (1 zettabyte corresponde a 1.000 millones de terabytes) anuales a finales de 2019, desde los 2,1 zettabytes registrados en 2014. Esto supone una tasa de incremento interanual del 33%. Cloud —el componente de tráfico de los data centers de más rápido crecimiento— supondrá el 83% de todo el tráfico data center global en 2019 (8,6 de un total de 10,4 zettabytes).
Distintos factores están acelerando el crecimiento de cloud, incluyendo el creciente uso de servicios en la nube por parte de las empresas, la proliferación de conexiones M2M (máquina a máquina) en la nueva era del IoE (Internet of Everything) y la mayor demanda de almacenamiento personal en la nube debido al incremento exponencial de dispositivos móviles.
En este sentido, el IoE —la conexión de personas, procesos, datos y objetos— representará un papel esencial en el crecimiento del tráfico data center y cloud. Las aplicaciones cloud del IoE generarán más de 500 zettabytes anuales en 2019 (49 veces el tráfico data center global previsto para 2019). Como ejemplo, una ciudad inteligente con un millón de habitantes creará 180 millones de gigabytes de datos diariamente en 2019.
El segmento de consumo también contribuirá al crecimiento de cloud. Habrá una mayor demanda de servicios de almacenamiento personal en la nube, de forma que en 2019 el 55% de los usuarios residenciales de Internet (más de 2.000 millones) utilizarán dichos servicios (42% en 2014, 1.100 millones de usuarios).
Cloud supondrá el 83% del tráfico data center global en 2019
Segunda oleada de adopción
Tras una primera etapa, en la que el ahorro de costes y el cumplimiento de los acuerdos de nivel de servicio (SLA) eran las premisas fundamentales, cloud está entrando en una segunda oleada de adopción, donde las compañías se apoyan en la nube como plataforma clave de crecimiento e innovación.
Según se desprende del estudio No se quede atrás: las ventajas empresariales de lograr una mayor adopción de la nube, realizado por IDC y Cisco, el 54% de los encuestados —responsables de TI y de negocio de 3.463 organizaciones de 17 países, incluido España— esperan que cloud les ayude a asignar el presupuesto de TI de una manera más estratégica en los próximos dos años; mientras, el 53% creen que gracias a la nube aumentarán sus ingresos.
Es así como la evolución en la curva de adopción implica mejores resultados empresariales. Las ventajas aumentan a medida que se pasa de una etapa a otra de madurez: ad hoc, oportunista, reproducible, gestionada y optimizada. Por ejemplo, pasar del nivel menos maduro (ad hoc) al más maduro (optimizado) permitiría incrementar los ingresos un 10,4%, reducir los costes un 77%, acelerar la provisión de servicios y aplicaciones un 99% y duplicar la capacidad de invertir en nuevos proyectos para impulsar la innovación.
Tipos de nubes y cargas de trabajo
Cloud facilita a empresas y administraciones el acceso ubicuo y bajo demanda a distintos recursos tecnológicos de computación (redes, servidores, equipos de almacenamiento, etc.), aplicaciones (sistemas operativos, bases de datos, ERP, CRM, etc.) y servicios (videoconferencia, colaboración, seguridad gestionada, redes gestionadas, etc.) configurables y que pueden ser rápidamente aprovisionados.
Aunque en la actualidad la nube privada se adopta con más frecuencia que la pública, según el informe Cloud Index, mientras la cloud pública crecerá a un ritmo interanual del 44% entre 2014 y 2019, la privada lo hará al 16%. Así, en 2019 el 56% de las cargas de trabajo cloud se procesarán en centros de datos con entornos cloud públicos (el 30% en 2014), mientras que el 44% restante serán procesadas en data centers con entornos cloud privados (el 70% en 2014).
La nube híbrida —la combinación de entornos públicos y privados— también adquiere mayor protagonismo, ya que según IDC siete de cada diez organizaciones pretenden migrar datos entre nubes públicas y privadas (o entre múltiples proveedores cloud), para lo que demandan funcionalidades avanzadas de gestión, seguridad y control.
Por modelos de servicio, el más extendido en 2019 —tanto en entornos públicos como privados— será el software como servicio (SaaS, software as a service) con un 59% del total de cargas de trabajo, seguido de IaaS (infrastructure as a service) con el 30% y de PaaS (platform as a service) con el 11%.
La Comisión Europea estima que cloud podría contribuir al PIB de la UE con 250.000 millones de euros en 2020, generando 3,8 millones de puestos de trabajo relacionados. Y el CEBR (Centro de Investigación Económica y Empresarial) calcula un beneficio económico —incluyendo ahorro de costes y generación de actividades económicas— de 177.000 millones de euros y 446.000 nuevos empleos en EMEA solamente en 2015 (25.000 millones y 74.000 nuevos empleos en España).
Pasar al nivel más optimizado permitiría acelerar la provisión de servicios un 99%
Estrategias avanzadas
Pero quizá lo más destacable es la carencia de estrategias avanzadas. A pesar de que casi seis de cada diez organizaciones (el 57%) ya utilizan la nube o planean implementarla en alguna de sus formas, sólo el 25% cuentan con estrategias de adopción maduras o avanzadas, que IDC define como “reproducibles, gestionadas u optimizadas” frente a estrategias “ad hoc y oportunistas”. Mientras, el 32% carecen de estrategia.Teniendo en cuenta este escenario, y con el fin de ayudar a las organizaciones a evaluar su nivel de adopción de la nube e identificar los aspectos de mejora, Cisco Business Cloud Advisor es una herramienta gratuita de autoevaluación basada en encuestas y en los resultados del estudio por país, así como en un workshop o jornada de análisis detallado (en colaboración con partners de canal cualificados) para quienes lo soliciten.
Así, a medida que salimos de la recesión, cloud debe entenderse no solo como una herramienta fundamental de reducción de costes, sino también de crecimiento económico mediante la oferta de innovadores servicios para empresas y consumidores.