En el último año, el traslado de los puestos de trabajo a los hogares ha obligado a los responsables de TI a crear entornos laborales remotos y seguros, y a hacerlo tomando decisiones muy rápidas.
Hoy, con un número significativo de personas trabajando desde sus domicilios, estos responsables están reajustando sus infraestructuras, evaluando si son adecuadas, seguras y fácilmente escalables para poder adaptarlas a las necesidades del nuevo entorno de trabajo híbrido.
Para ello, el 71% de los responsables de TI de nuestro país prevé aumentar su gasto en los próximos doce meses, según un estudio que hemos realizado entre empresas de diversos sectores de actividad del Reino Unido, Francia, Alemania, España y los Países Bajos. De hecho, las españolas se sitúan a la cabeza en intención de gasto, seguidas de las de los Países Bajos, con cerca de un 70% de las encuestadas.
La flexibilidad laboral y la deslocalización de los equipos de trabajo son el motor del crecimiento del gasto
La flexibilidad laboral y la deslocalización de los equipos de trabajo son, según el estudio, el motor de este crecimiento del gasto. En concreto, el documento revela que, tras la pandemia, el 43% de los empleados de nuestro país trabajará desde casa o no dispondrá de un lugar fijo de trabajo, frente al 28% registrado antes de la crisis sanitaria. ¿Cómo se adaptarán los responsables de TI a esta nueva realidad empresarial?
Potenciar la productividad
En la encuesta que Gartner realiza anualmente entre más de dos mil CIO, el 83% afirma que la demanda de nuevos productos y servicios digitales seguirá aumentando este año, con el objetivo de garantizar la productividad a distancia de la fuerza de trabajo.
Los confinamientos han permitido a muchas organizaciones aprovechar las últimas tecnologías para colaborar con mayor eficacia; mientras, otras han experimentado un parón en la productividad. Estos dos aspectos (la productividad y la colaboración de los empleados) siguen siendo el reto principal para una transición continuada y eficaz hacia el trabajo a distancia e híbrido a gran escala. En concreto, según nuestro estudio, más de un tercio de los responsables de TI europeos considera que son las áreas más difíciles de gestionar y, por tanto, donde concentran el grueso de la inversión.
Este reto pasa por equipar a los empleados con las herramientas adecuadas. Nuestro estudio señala que el 54% de las empresas de nuestro país considera prioritario invertir en soluciones de soporte en remoto. Otras herramientas fundamentales señaladas son las de comunicación y colaboración (49%), o el equipar a los empleados con smartphones, tabletas y portátiles (46%).
Dispositivos más demandados
Los dispositivos han sido durante mucho tiempo un componente esencial de cualquier infraestructura tecnológica, pero su papel en el mundo empresarial ha sido subestimado. Basta mencionar como ejemplo la tan extendida práctica del BYOD, con el riesgo para la seguridad que conlleva el uso de dispositivos domésticos.
El 54% de las empresas de nuestro país considera prioritario invertir en soluciones de soporte en remoto
Esta mentalidad ha cambiado y los dispositivos portátiles profesionales se han revelado como los grandes héroes durante los confinamientos. El 66% de las empresas españolas encuestadas considera que disponer de un parque amplio de ordenadores portátiles empresariales ha cobrado mayor importancia con la crisis sanitaria. De hecho, este tipo de dispositivo será el que más incorporarán a su infraestructura de trabajo a distancia en el próximo año. Además, el 84% señala que el portátil es el dispositivo más utilizado para trabajar a distancia, seguido del smartphone (71%) y el PC (52%).
En lo que respecta a las prestaciones, el 81% de las empresas sitúa la seguridad y la conectividad al mismo nivel en el momento de valorar la compra de un portátil. Además, tienen en cuenta el rendimiento (77%), la autonomía (75%), las funciones que favorecen la colaboración (73%) y la portabilidad (69%).
En 2020 muchas organizaciones pulsaron el botón de reinicio de sus TI. La reconfiguración de muchas empresas para adaptarse a trabajar a distancia ha supuesto cambios significativos en las prioridades del departamento de TI, y muchas compañías han actualizado sus soluciones, los dispositivos o la infraestructura de seguridad. Ahora que la urgencia ha pasado, tienen la oportunidad de dar un paso atrás y evaluar la transición hacia un modelo de trabajo híbrido, así como las necesidades de TI que se les plantean.