El pasado año, la multinacional surcoreana lanzó al mercado una nueva revisión de su Galaxy Note, una familia que desde 2012 ocupa la escala más alta dentro de su gama premium y que está caracterizada por su reconocible y diferenciador S Pen. En esta ocasión, Samsung ha presentado su producto estrella en dos tamaños —6,3” y 6,8”, ambos con pantalla Dynamic AMOLED— con los que busca dar un impulso a las ventas de terminales en una gama que cada vez está más competida.

En esta ocasión, los argumentos de este Samsung Galaxy Note 10 se basan en la mejora de algunos aspectos importantes (rendimiento, cámara o S-Pen) aunque, al mismo tiempo, presenta también una estética nueva y muy llamativa, con un diseño sin bordes extremadamente compacto y ligero (7,9 mm de grosor) y una terminación en metal y vidrio que aporta un punto adicional de elegancia.

Presenta una estética nueva y muy llamativa, con un diseño sin bordes extremadamente compacto y ligero

Otras novedades en su diseño es la reubicación en los botones físicos de volumen y encendido, que ahora están en el lateral izquierdo; la desaparición del puerto tipo jack de 3,5 mm en benefició del USB-C para la conexión de los auriculares; o el espacio disponible en la zona posterior para albergar el sistema de triple cámara: gran angular de 16 MP y de 12 MP, y una tercera (teleobjetivo) también de 12MP. En este sentido, las prestaciones que ofrece son muy interesantes, tanto por los diferentes modos y asistentes con los que cuenta (algunos de ellos disponibles también para la cámara del frontal), como por el nivel de personalización de su modo Pro a la hora de gestionar manualmente todo tipo de parámetros de captura (exposición, enfoque, etc.).

En lo que respecta a la grabación de vídeo, aparte del soporte 4K 60p destacar también sus posibilidades en cuanto al enfoque dinámico en vivo, su herramienta de gestión del audio que permite mitigar el ruido de fondo o el sistema de estabilización para reducir las típicas vibraciones de la captura en movimiento.

El S Pen es el elemento que más capta la atención. La escritura e interacción en pantalla sigue siendo diferencial

Pero, sin duda, el S Pen es el elemento que más capta la atención. Poco a poco Samsung ha ido integrando cada vez más funcionalidades, como la de hacer las veces de un mando a distancia para activar la cámara, o gestionar la reproducción de fotografías o el volumen. Ahora, incluso es posible hacerlo a través de gestos, aunque esto es algo que todavía requiere de un proceso de mejora.

En cualquier caso, la escritura en pantalla y la interacción con todo tipo de elementos multimedia (incluso en la edición de video) sigue siendo diferencial a la hora de crear contenido y compartir ideas. Además, ahora es mucho más sencillo convertir la escritura manuscrita en texto editable a través de Samsung Notes.

Por último, además de su excelente pantalla Infinity-O o su autonomía (algo más de una jornada), es importante hacer nota la interesante evolución de su sistema de autenticación, y la rapidez y exactitud con la que identifica al usuario a través su lector de huellas por sensores de ultrasonidos (una vez solventados los problemas iniciales con los protectores de pantalla de silicona), y su sistema de reconocimiento facial.

  • Diseño compacto y muy atractivo.
  • El S Pen sigue siendo su mejor argumento de compra.
  • Rendimiento y sistema de captura.
  • El manejo a través de gestos con el S Pen le queda todavía algo de recorrido.
  • Se le podría pedir más autonomía.