Philips 243S1

Philips 243S1. La pantalla es un elemento que debería ser clave a la hora de plantear un entorno de trabajo cómodo y productivo. Es importante que ofrezca una adecuada experiencia al usuario en cuanto a calidad, rendimiento y conectividad, pero también a la hora de incorporar tecnologías especialmente pensadas para reducir la fatiga visual o mejorar la ergonomía del conjunto.

La respuesta del Philips 243S1 a todos estos parámetros es más que acertada. Para empezar, hablamos de un panel con tecnología IPS de 23,8” de diagonal y resolución Full HD (1920 x 1080 píxeles). La calidad de imagen que podemos esperar de este panel es muy elevada para un contexto de trabajo convencional, teniendo en cuenta parámetros como el tiempo de respuesta típico (4ms), el nivel de brillo de 250 cd/m2 o el ángulo de visualización (178º tanto en vertical como en horizontal).

Además de la calidad de visualización, el Philips 243S1 destaca por su ergonomía y las posibilidades de su SmartErgoBase

Como complemento, este Philips 243S1 incorpora una serie de características especialmente pensadas para hacer más cómodo el trabajo diario frente al monitor. Por ejemplo, cuenta con certificación TUV Eye Comfort, además de tecnologías como Flicker-Free para regular el brillo y reducir el parpadeo; o el modo LowBlue, que reduce la luz azul de onda corta para evitar los típicos efectos relacionados con el uso constante de pantallas.

Otra de las características que hay que destacar es su SmartErgoBase. Básicamente se trata de un conjunto de funciones incorporadas a su peana de apoyo que ofrece todos los ajustes necesarios para conseguir una adecuada posición del monitor frente al usuario.

La ergonomía que incorpora permite definir de forma muy sencilla aspectos como la altura (hasta 130 mm), la inclinación (entre -5 y 25 grados), la rotación de la base o incluso situar el monitor en formato vertical. Esto permite acomodar la pantalla a las necesidades de todo tipo de contextos y de usuarios, ayudando a conseguir una adecuada posición de trabajo, reducir los dolores tensionales, etc.

Por último, también poner el foco en la conectividad. Esto es especialmente importante a la hora de reducir el número de complementos y cables que pululan por nuestra mesa de trabajo. En el caso de este Philips 243S1 podremos contar con una estación de acoplamiento USB-C integrada. Además de facilitar la conexión en cadena para configuraciones de múltiples monitores, esto permite —a través de un solo cable— llevar la señal de audio y video al monitor, incluyendo también el necesario suministro de energía del portátil.

Además de esto, cuenta también con varios conectores USB 3.2 (para conectar todo tipo de periféricos externos posibilitando incluso su carga), HDMI, entrada y salida de audio o incluso un puerto ethernet RJ-45 con función Wake on LAN para integrarse rápidamente en contextos empresariales.