Los efectos de la pandemia han sido demoledores en el mercado laboral. Según la Organización Internacional del Trabajo, la pérdida de horas de producción en 2020 fue cuatro veces mayor que la registrada durante la crisis de 2009. El teletrabajo ha llegado para quedarse, pero elegir a un buen compañero tecnológico de viaje es crucial.

Con el fin de mantener la continuidad de los negocios en lo más duro de la pandemia, una de las fórmulas más utilizadas, en los sectores donde era posible, fue la del teletrabajo. Según un estudio realizado durante los meses de confinamiento por Eurofound, casi el 40% de todas las personas que trabajan en territorio de la Unión Europea (UE) optaron por hacerlo a distancia, cifra que ha ido en aumento y con perspectivas de continuidad muy positivas. 

Así lo constata un estudio de la Universidad Politécnica de Valencia dirigido por Gabriela Ribes, profesora titular de Organización de Empresas. En dicha investigación, referida al mercado español, se pone de manifiesto cómo el teletrabajo no era una práctica muy extendida en nuestro país, hasta el punto de que más del 70% de los encuestados admite que nunca había trabajado desde casa antes del coronavirus.

Durante la pandemia, en cambio, la cifra se disparó significativamente entre los organismos públicos y privados que han participado en la encuesta. El 86% de los empleados estaría dispuesto a continuar teletrabajando al menos un día a la semana tras la crisis sanitaria, mientras que el 18,6% recurriría a esta fórmula toda la semana.

Se ha llegado a un punto de inflexión. A partir de ahora, según la profesora Ribes, se van a crear fórmulas mixtas: parte del trabajo será presencial y, el resto, a distancia. El INE revelaba en su última Encuesta de Población Activa (EPA) que, durante los primeros tres meses de 2021, el 11,2% de los ocupados (más de 2,1 millones de personas) trabajaron desde su domicilio más de la mitad de los días, frente al 9,9% observado en el cuarto trimestre de 2020.

Aumentar la productividad

La experiencia ha demostrado que este nuevo concepto del trabajo no solo no ha hecho perder productividad, sino que la ha incrementado. Así lo reconoce un 45% de los encuestados en un estudio de IPSOS para Samsung Electronics. Sin embargo, los trabajadores han de contar con la tecnología necesaria para desempeñar sus tareas. 

En el caso de Samsung, una de sus ventajas es el ecosistema que conforman sus diferentes equipos, los cuales pueden interoperar fácilmente. Un buen ejemplo es Samsung DeX, con la que cualquier dispositivo móvil de Samsung (smartphone o tablet lanzado a partir de 2017) se puede conectar al televisor o al ordenador (PC o Macintosh). Esta plataforma proporciona una experiencia de escritorio, con ventanas redimensionables y capacidad de transferir archivos fácilmente, cambiando entre aplicaciones móviles y de escritorio. 

En el caso de las tablets, en las que, gracias a las dimensiones de la pantalla, es posible trabajar directamente, Samsung DeX dispara la productividad, especialmente si se opta por incorporar la funda con teclado, que dispone de un trackpad más grande y teclas de función intuitivas.

Atrás han quedado los accesorios que hace años eran necesarios para establecer estas conexiones; con el lanzamiento del Note 20 se superaron estas trabas al presentar el DeX inalámbrico, que conecta los dos equipos mediante wifi (disponible para Galaxy S21/S21+/S21 Ultra).

Con Samsung DeX es posible convertir cualquier smartphone o tablet Samsung en un ordenador y vivir una experiencia de escritorio.

Nuevos modelos, más facilidades

Algunas de las últimas novedades de Samsung —los modelos Galaxy S21 Ultra, S21+ y S21 Enterprise Edition— les allanan a las organizaciones el camino al futuro del trabajo, además del presente. Su conectividad ha dado un salto cualitativo respecto a otros modelos del mercado al incorporar 5G y Wifi 6E, con la que puede alcanzar velocidades de hasta 2,4 Gbps. Además, esta gama es el primer smartphone de Samsung compatible con S Pen, dispositivo que simplifica extraordinariamente tareas como tomar notas o trazar esquemas digitales. 

Gracias a su integración con herramientas de productividad como Microsoft Teams y Office 365, y a la plataforma Samsung DeX, el empleado puede llevarse la oficina a cualquier lugar y trabajar desde ella en cualquier momento, accediendo a aplicaciones de PC, sincronizándose con él y manteniendo inalterable la colaboración con el resto de su equipo, como si todos se encontraran en el mismo recinto. 

En este sentido, el modelo Galaxy S21 Ultra 5G dispone de tecnología Ultra Wide Band (UWB), gracias a la cual los empleados pueden compartir archivos de forma segura o incluso utilizar su dispositivo como llave digital para acceder a la oficina. 

Además, con el objetivo de democratizar todas estas innovaciones, Samsung ha lanzado la gama Enterprise Edition dentro de la familia Galaxy A. 

Control y seguridad

En líneas generales, el estudio de IPSOS revela que el 78% de los encuestados disponía ya de equipos en sus hogares para poder teletrabajar. Sin embargo, surgen las preocupaciones relacionadas con la seguridad en los accesos a la red corporativa a través de esos equipos de uso doméstico. A esto hay que sumar las preocupaciones relativas a la tendencia BYOD (bring your own device), que abre también un abanico de vulnerabilidades

Tal y como revelaba el último Informe de seguridad móvil 2021 de Check Point, la práctica totalidad de las empresas ha experimentado al menos un ataque de malware móvil. Además, el 46% de las empresas fueron atacadas después de que un empleado descargara una aplicación móvil maliciosa.

La plataforma Samsung Knox Suite ha nacido para resolver este problema, tanto desde la óptica del control como desde la de la seguridad. Cuando una empresa apuesta por un entorno mixto, que es hacia el que nos encaminamos, la administración de los dispositivos puede suponer un quebradero de cabeza para el administrador de sistemas.

Sin embargo, gracias a Knox Suite y a funcionalidades como la Knox Manage (Enterprise Mobility Management,EMM) o el Knox E-FOTA, el administrador disfruta de una gestión multiplataforma y puede instalar de manera remota cualquier actualización en todo el parque móvil, garantizando así su compatibilidad con el resto de las apps. 

Asimismo, la plataforma de seguridad Knox proporciona blindaje militar a las organizaciones, a las que ofrece una experiencia de usuario unificada, Single Sing On (SSO) y seguridad a nivel de chip. Algo que, además, se ha extendido a todos los productos Galaxy lanzados desde 2019, incluidas las series Z, S, Note, A, M, XCover y Tab, que recibirán actualizaciones de seguridad regulares durante un mínimo de cuatro años después del lanzamiento inicial del teléfono.