“La cultura y la tecnología deben desempeñar un papel clave en los modelos de trabajo híbridos o remotos”
¿Cómo han evolucionado los modelos de trabajo durante estos últimos años?
La pandemia supuso un impulso para aquellos proyectos dirigidos a la digitalización y la transformación de los entornos virtuales y del trabajo, primero a distancia y después en modo híbrido. Como consecuencia, hemos visto un aumento en el desarrollo de los entornos de trabajo híbridos y en la incorporación de la tecnología más innovadora.
De hecho, según cifras de IDG, la demanda de herramientas de colaboración creció, solo en 2021, un 28,4% interanual. Y parece que esa cifra seguirá aumentando: se espera que el mercado de estas herramientas alcance un valor estimado en 63.800 millones de dólares para el año 2026.
Un claro ejemplo de ello es la evolución de Microsoft Teams, que, desde su lanzamiento hace cuatro años, ha crecido hasta convertirse en elemento clave para el trabajo en equipo con más de 300 millones de usuarios activos al mes. Lo mismo ha sucedido con Microsoft 365, que ha crecido un 18% durante el último trimestre; y con Azure y otros servicios en la nube, que han aumentado un 38%, con una fuerte demanda de nuestros servicios de consumo.

¿Esto es algo que afecta solo a las grandes empresas?
No hay un modelo que sirva a todos, ni siquiera a la misma compañía en todas sus ubicaciones. De este modo, lo primero que se debe hacer es determinar qué perfiles tiene cada compañía para ver qué tipo de modelo híbrido puede adoptar, teniendo en cuenta tres pilares que se han de gestionar: las personas, los procesos y los espacios.
Los modelos de trabajo han evolucionado (y seguirán haciéndolo) adaptándose a las necesidades particulares de cada empresa, equipo o persona. Nuestra intención es seguir facilitando ese proceso de adaptación a través de soluciones tecnológicas que aporten eficacia, inteligencia y seguridad al puesto de trabajo; todo ello respetando, por supuesto, la privacidad de las personas.
También ha cambiado el posicionamiento del empleado
Nuestros informes ya señalaban hace unos meses un cambio fundamental en la forma en que las personas definen el papel del trabajo en su vida. Las cifras indicaban que el 53% de los encuestados daba más importancia a aspectos como la flexibilidad o el bienestar a la hora de decidir qué trabajo elegir.
Las empresas deben escuchar las expectativas del empleado y responder a ellas sin dejar de lado los objetivos empresariales
Ante estas nuevas necesidades, los modelos de trabajo híbrido o a distancia han aportado ventajas, como un aumento de la flexibilidad y el bienestar de las personas. Sin embargo, en ocasiones también han planteado un gran reto en aspectos como la alineación de los empleados con los objetivos o prioridades de la empresa, o la optimización de la experiencia de empleado.
Las organizaciones deben ser capaces de escuchar las nuevas expectativas de los trabajadores y responder a ellas sin dejar de lado los objetivos de la empresa. Uno de los últimos estudios de Microsoft recoge que el 96% de los encuestados considera que la comunicación eficaz es la habilidad más importante que los mánager necesitarán el año que viene. Por ello, es clave que cuenten con soluciones que les ayuden a entender mejor a su organización, o, lo que es lo mismo, a sus empleados.
En esta línea es donde incide uno de nuestros últimos anuncios: la integración de la inteligencia artificial a través de Copilot en varios módulos de Microsoft Viva, que proporcionará a los responsables una ayuda extra a la hora de conocer las opiniones de los empleados, establecer objetivos, comunicarse dentro de la organización y gestionar la experiencia de empleado en su conjunto.
¿Cuáles son las claves para avanzar en este aspecto?
Actualmente existe una preocupación generalizada por la productividad, conocida como la “paranoia de la productividad”: los directivos consideran que los equipos que trabajan en remoto son menos eficaces; sin embargo, estos son los empleados que se sienten más productivos.
Las personas buscan trabajos en los que se fortalezca su creatividad y satisfacción, y que les hagan sentirse parte de la cultura y misión de su compañía. Las organizaciones con personas comprometidas obtienen el doble de beneficios que las que no las tienen.
Lograr que los empleados se sientan conectados a su equipo de forma remota es uno de los principales retos que siguen teniendo por delante muchas organizaciones, y optimizar la experiencia, tanto individual como de los grupos de trabajo, una prioridad.
Esta conexión con el resto de la organización es necesaria para gozar de una experiencia laboral saludable y es un requisito básico para mantener una cultura de innovación y creatividad en las organizaciones. Gracias a ello será posible atraer y fidelizar a empleados que realmente se impliquen y comprometan, y que sean capaces de trasladar esta implicación incluso fuera de la compañía.
Hablamos de tecnología y de cultura
Efectivamente. Somos conscientes de que, a medida que los empleados adoptan hábitos propios del trabajo híbrido o completamente remoto, cultura y tecnología deben desempeñar el papel clave de facilitar la conexión y la colaboración interdisciplinar.
Las organizaciones con personas comprometidas obtienen el doble de beneficios que las que no las tienen
Por ejemplo, Microsoft Viva ofrece información acumulada que permite a los equipos detectar signos de agotamiento o hábitos poco saludables; una información que pone a disposición de los mánager para que estos puedan identificar dónde conviene modificar algo o aplicar mejores prácticas. De esta manera, las compañías pueden implantar una cultura digital que optimice tanto la experiencia de los empleados como la gestión de los equipos.
Y en cuanto a los empleados, Viva les asiste para que puedan gestionar su jornada de forma óptima, ofreciéndoles consejos sobre cómo organizar mejor la jornada o propuestas de formación personalizadas; e incluso les ayuda a desconectar buscando huecos de descanso.
La distancia no tiene por qué suponer una reducción de la productividad, del mismo modo que el trabajo a distancia no debe ser una excusa para estar siempre “en línea”. Uno de los propósitos de los modelos híbridos de trabajo es optimizar la experiencia del empleado, independientemente de desde dónde trabaje.
Los últimos estudios de Microsoft señalan que las organizaciones con más éxito son aquellas en las que se da prioridad tanto a la productividad como al compromiso de los empleados.
Cultura y tecnología deben desempeñar un papel clave para facilitar la conexión y la colaboración interdisciplinar
Una mejor experiencia de empleado ayuda a las empresas a poner a las personas en el centro, proporcionándoles las herramientas que realmente necesitan para sentirse conectadas al resto de la organización. Además, tiene un impacto directo en la experiencia del cliente: un empleado satisfecho, comprometido y productivo aporta mejores resultados, que se ven reflejados en una mejor relación entre la empresa y el cliente.
Esta es una tendencia al alza en todo tipo de organizaciones
En el ámbito de la experiencia de empleado, cada vez son más las organizaciones que reconocen la importancia de lograr el bienestar de los empleados para alcanzar el éxito. De hecho, en cuanto a resultados se refiere, lo hemos visto reflejado en las cifras de nuestra plataforma Microsoft Viva. Solo en un año, esta solución ha alcanzado más de veinte millones de usuarios activos mensuales y ya es utilizada por más de mil clientes, a los que ayuda a afrontar retos como el agotamiento o la retención de talento.
En cuanto a casos de implementación, con soluciones como Microsoft Viva tenemos ejemplos muy diversos. Desde multinacionales como PayPal, que la utiliza para proporcionar a sus clientes un servicio cómodo, fiable y seguro, al mismo tiempo que mantiene el bienestar de sus empleados en todo el mundo; hasta ONG como Educo, que, gracias a una intranet basada en Viva, ha logrado un trabajo más eficaz, eficiente y sostenible, que redunda de forma directa en una mejora de la labor que realiza por la infancia y la educación; o grandes organizaciones, como Carlsberg, que ha logrado mejorar la experiencia de más de 29.000 empleados.