Es evidente que las posibilidades que brindan la inteligencia artificial y el deep learning están generando muchas expectativas en todo tipo de organizaciones. Pero, aparte de los evidentes beneficios que nos dejará, existe una preocupación creciente en torno a los retos éticos y morales que su uso plantea.

Para conseguir una visión más de contexto sobre todo esto, os invito a leer el interesante artículo que sobre este tema publicamos recientemente en nuestra sección Tendencias: Legalidad y legitimidad.

Teniendo en cuenta este escenario, SAP SE ha hecho públicos sus principios rectores para la inteligencia artificial (AI), anunciando además la creación de un grupo asesor de ética externo, formado por expertos del mundo académico, la política y la industria. El objetivo de estas medidas es garantizar que las capacidades de IA, respaldadas por las prestaciones de machine learning de SAP Leonardo, se utilicen para mantener la integridad y la confianza en todas las soluciones.

En palabras de Luka Mucic, director financiero y miembro del Comité Ejecutivo de SAP SE: «Queremos crear software que haga posible la empresa inteligente y realmente mejore la vida de las personas. Dichos principios servirán de base para hacer de IA una tecnología que aumente el talento humano«.

Los principios rectores de SAP reflejan el compromiso de la compañía de cumplir con los más altos estándares éticos, haciendo posible los negocios sin prejuicios, mantener la transparencia y la integridad, y defender la calidad y la seguridad.

De momento, los miembros que componen este grupo asesor son:

  • En Teología Peter Dabrock, Catedrático de Teología Sistemática (Ética), Universidad de Erlangen-Nuernberg.
  • Henning Kagermann, presidente del Patronato y senador de acatech (Academia Alemana de Ciencia e Ingeniería).
  • Susan Liautaud, profesora de Políticas Públicas y Derecho, Stanford & Founder; Directora general de Susan Liautaud & Associates Limited (SLAL).
  • Helen Nissenbaum, Profesora, Cornell Tech Information Science.
  • Nicholas Wright, consultor, biología inteligente; investigador asociado en el Centro Pellegrino de Clínica Bioética del Centro Médico de la Universidad de Georgetown; Investigador honorario asociado del Instituto de Neurociencia Cognitiva, University College London.

«La Inteligencia Artificial ofrece inmensas oportunidades, pero también plantea desafíos éticos sin precedentes y con frecuencia impredecibles para la sociedad y la humanidad«, ha señalado Susan Liautaud.