Uno de los efectos claros de esta masiva adopción del trabajo a distancia ha sido el espectacular incremento que está viviendo el mercado de portátiles, como así lo están atestiguando todos los fabricantes, pero también el de todos los periféricos que lo suelen acompañar.

Muchos portátiles, sobre todos los de ámbito profesional, están pensados para poder trabajar con ellos durante muchas horas, pero, qué duda cabe, poco a poco vamos echando en falta un teclado más amplio, un ratón externo -por lo menos ese es mi caso- o una pantalla de mayor tamaño que permita trabajar con mayor comodidad. Todo esto, y mucho más, es lo que propone este Philips 272B7QUBHEB, un auténtico todoterreno cuando se trata de acompañar el uso de un ordenador portátil.

Para empezar, estamos hablando de un dispositivo con pantalla IPS de 27” de diagonal, con bordes muy finos, que ofrece una excelente calidad en la reproducción del color gracias a diferentes tecnologías como Ultra Wide-Color, acompañada de características como su nivel de brillo de 350 cd/m2 y un ángulo de visualización de 178º tanto en vertical como en horizontal. Además, de forma nativa utiliza una resolución de 2560×1440, ofreciendo un espacio de trabajo mucho más amplio y cómodo que cualquier pantalla de portátil convencional. Como complemento, incluye un buen número de modos de visualización con diferentes configuraciones de color. Entre ellos se incluye uno pensado para hacer más cómoda la lectura de documentos y otro, denominado LowBlue, que reduce la luz azul, cuyo uso continuo, según algunos estudios, puede provocar daños.

Otro de los aspectos que hay que destacar es todo lo relativo al diseño y la ergonomía. El Philips 272B7 cuenta con una línea estilizada y toda una serie de detalles que hacen que ocupe muy poco espacio en la mesa de trabajo, más allá de estrictamente necesario. La peana permite un ajuste en altura de hasta 150mm, además del giro (en un ángulo de +-150º) la inclinación o incluso la rotación para situarla en modo vertical. Todo ello de un modo muy sencillo y sin apenas esfuerzo.

Cuenta con una línea estilizada y toda una serie de detalles que hacen que ocupe muy poco espacio en la mesa de trabajo

Pero, seguramente, donde más destaca este dispositivo es en los complementos. Por ejemplo, en la zona superior aparece una cámara web emergente (con soporte para Windows Hello) que se puede esconder siempre que no se esté usando. Además, en la zona posterior encontraremos una estación base USB Type-C integrada que nos permitirá también cargar el portátil, o cualquier otro dispositivo, gracias a su sistema de gestión de energía. Además, simplifica la conexión de todo tipo de periféricos e incluye también un conector RJ-45 para redes Ethernet 10/100/1000, facilitando su rápida adopción en ambientes empresariales.

Por último, destacar también su conector DisplayPort, que permite conectar varias pantallas de una forma muy sencilla y a través de un solo cable, o su sistema PowerSensor, que detecta la presencia -o no- del usuario para reducir de forma automática el nivel de brillo, disminuyendo el gasto energético hasta un 70%.

Como puntos a mejorar, podemos hablar de la calidad del sistema de altavoces integrado o la ausencia de un botón de volumen directo en la pantalla.