Si tuviera que definir a este Asus ZenFone 10 en pocas palabras, seguramente lo haría como “la mejor alternativa cuando se trata de elegir un smartphone de gama premium, pleno de funcionalidades, pero con un diseño compacto que no merma en absoluto sus prestaciones; y, además, se puede manejar con una sola mano”.

Siguiendo la estela de la gama, este nuevo modelo da una vuelta de tuerca sobre el anterior Asus Zenfone 9, manteniendo sus características diferenciadoras e introduciendo una serie de novedades que, en mayor o menor medida, argumentan la actualización.

Asus ZenFone 10, el mejor teléfono compacto

Aunque había rumores en sentido contrario, Asus sigue manteniendo la seña de identidad de los Zenfone y su apuesta por el mercado de teléfonos compactos. Este Asus ZenFone 10 integra una pantalla de 5,9” (mismo tamaño que el anterior modelo), que es sensiblemente más pequeña que la mayoría de los teléfonos del mercado, incluso más que las alternativas compactas de firmas como Samsung, Google o Apple.

El objetivo, según Asus, es poder manejar el móvil en todo momento con una sola mano… y vaya si lo consigue

El objetivo, según Asus, es poder manejar el móvil en todo momento con una sola mano… y vaya si lo consigue. Además de lo compacto de su estructura, o el marco ligero y estrecho, ayuda mucho su peso —de tan solo 172 g— o los materiales utilizados para la trasera del dispositivo (plástico de policarbonato), que le confiere un mejor agarre y esa sensación de seguridad que se echa de menos en otros modelos.

La verdad es que se agradece la posibilidad de manejar el teléfono con una sola mano, pudiendo recorrer prácticamente toda la pantalla con el pulgar mientras tomas un café, vas viajando en transporte público (agarrado de una barandilla, por ejemplo) o simplemente por el hecho de poder hacerlo. De hecho, cuenta con un modo especial que divide la pantalla en horizontal para facilitar el acceso a todas las funciones desde la mitad inferior.

En este sentido, ayuda también la disposición de sus botones, situados en el lateral derecho; especialmente el denominado ZenTouch, que sirve para encender el dispositivo (integra el sensor de huellas dactilares) aunque también se le pueden asignar diferentes funciones (deslizar las notificaciones, lanzar alguna aplicación, activar el asistente o la entrada de voz…) configurables desde el menú de ajustes.

Pequeño en tamaño, pero…

Una de las claves de estos Zenfone es su capacidad para, a pesar de su reducido tamaño, mantener unos niveles muy altos de calidad y prestaciones. Un ejemplo claro es la pantalla, un panel AMOLED de 5,9 pulgadas — protegido con Corning Gorilla Glass Victus— que ofrece una resolución FHD+ (2400 x 1080p), una densidad de 445 ppp o una frecuencia de refresco típica de 120 Hz (con ajuste dinámico), que puede llegar hasta 144 Hz cuando se activa el modo juegos.

También es importante destacar su excelente comportamiento en la reproducción del color o su elevado nivel de brillo (hasta 1100 nits), que se deja notar también en exteriores.

Al final, todo esto se traduce en una experiencia de pantalla impactante, con un funcionamiento fluido y brillante en la reproducción de todo tipo de contenido, también cuando se enfrenta a los últimos títulos en el ámbito del gamming. De hecho, muchas de sus características tienen ese tipo de púbico en el horizonte.

Un ejemplo es su equipamiento en cuanto al sonido, que es realmente diferenciador. Cuenta con dos altavoces estéreo con amplificadores inteligentes Qualcomm WSA8835 y tecnología Dirac HD Sound para ofrecer un excelente nivel de potencia y nitidez que se deja notar. Además, para los más melómanos, cuenta con un ecualizador de diez bandas (AudioWizard) y la posibilidad de crear diferentes perfiles según el tipo de contenido.

Para completar este apartado, hacer notar su entrada tipo Jack de 3,5 mm, un guiño a todos aquellos que quieren seguir aprovechando los auriculares que usan este conector o se resisten a pasar a los modelos inalámbricos. Como carta a los Reyes Magos, aunque ya está prácticamente en desuso, se podría haber aprovechado este conector para incorporar la clásica radio FM.

Estabilización de la imagen

En cuanto al sistema de captura, el Asus Zenfone 10 mejora lo ofrecido por su antecesor, tanto en el apartado del software y las tecnologías que acompañan su sistema de sensores, como —y de forma muy especial— en lo que respecta a la estabilización de la imagen en movimiento.

En la parte trasera sobresalen dos objetivos tipo isla, en los que se ubica una cámara principal Sony IMX766 de 50 MP con estabilizador de seis ejes, así como un ultra gran angular, con sensor de 13 MP y un campo de visión de 120º.

Su sistema de estabilización reduce gran parte de las vibraciones, produciendo secuencias con transiciones mucho más suaves

A esto hay que unir el interesante conjunto de funciones de ayuda —incluida la inteligencia artificial— y asistentes que ofrece, así como los diferentes modos de captura (retrato, noche, etc.) o de apoyo en el sistema de estabilización. El resultado es una cámara de gran calidad, capaz de ofrecer unos resultados más que notables en la mayoría de las situaciones, incluso sin ser un usuario experto.

En cuanto a la captura de video, hay que hacer una especial mención a este sistema de estabilización, que reduce gran parte de las típicas vibraciones al grabar escenas en movimiento, produciendo secuencias muy mejoradas, con transiciones mucho más suaves. Cuenta con dos modos: Adaptative (con ajuste dinámico) o HyperSteady, que es el más indicado cuando hay mucho movimiento que corregir.

Por último, de su cámara frontal (32 MP) es importante hacer notar su sensor RGBW, aportando una mayor luminosidad a los autorretratos, especialmente cuando hoy objetivos iluminados al fondo.

A toda máquina

En cuanto a su nivel de prestaciones, el Asus Zenfone 10 se encuentra en lo más alto del mercado. El dispositivo que hemos analizado está equipado con el último Snapdragon 8 Gen 2 con GPU Adreno 740, junto con 16 GB de memoria RAM y 512 GB de almacenamiento.

El rendimiento que ofrece es tal y como se podría esperar de esta configuración, con una carga instantánea —tanto del sistema como de las aplicaciones— y un funcionamiento muy fluido en todo de tipo de usos, incluidos los juegos con un eminente protagonismo gráfico. Además, sin que hayamos notado un calentamiento excesivo cuando se hace un uso intensivo del terminal. ¡Todo un acierto en este sentido!

Para ello se apoya en una batería de 4300 mAh de capacidad (con cargador de 30 vatios) que, gracias a las mejoras en eficiencia de sus componentes, ofrece una autonomía “oficial” de más de 21 horas.

Durante estos meses solo he necesitado cargar el teléfono cada dos o tres días, dependiendo del tipo de uso

En la práctica, durante estos meses de prueba solo he necesitado cargar el teléfono cada dos o tres días aproximadamente, dependiendo del tipo de uso (mayor o menos demanda de datos inalámbricos, posicionamiento, horas de juego…). Además, cuenta con diferentes modos de carga para alarga la vida útil de la batería y está equipado con carga inalámbrica de 15 vatios.

Personalización

A diferencia de otros fabricantes, Asus no carga en exceso el interfaz de sus Zenfone (ZenUI), integrando unos pocos —pero interesantes— detalles como una gestión mejorada del volumen, la apariencia de las notificaciones o el menú de encendido.

Además, cuenta con multitud de opciones de personalización, como los atajos que se pueden asignar al botón ZenTouch o la herramienta Edge, con accesos directos a las funciones o aplicaciones más utilizada, que podrán abrirse en modo ventana flotante.

Otras características que hay que tener en cuenta son su certificación IP68 (que garantiza la protección a agua y polvo), o la doble ranura para tarjetas nanoSIM, permitiendo gestionar dos números de teléfono desde el mismo terminal.

  • Todo un portento de prestaciones en cuerpo compacto.
  • La pantalla y el equipamiento de sonido.
  • Interfaz muy liviano, pero con muchas posibilidades de personalización.
  • El sistema de captura tiene margen de mejora.
  • Por pedir, radio FM a través del conector de 3,5 mm.