
Senderismo en el desfiladero de los Gaitanes (Málaga)
Algo de historia: vamos a recorrer un paso entre desfiladeros que surgió a finales del siglo XIX como alternativa energética al carbón. El desnivel existente entre los saltos del Gaitanejo y de El Chorro permitía la producción de electricidad, pues el agua llegaba a caer de más de cien metros de altura. La Sociedad Hidroeléctrica del Chorro necesitaba acceder a ambos y construyó un camino adosado a la roca para que los operarios pudieran desplazarse de una a otra para tareas de mantenimiento, de vigilancia del paso o para el transporte de material. En 1921 el rey Alfonso XIII colocó la última piedra del embalse de El Chorro y recorrió este camino hasta la localidad del mismo nombre. A partir de 1953 es cuando este vertiginoso recorrido empezó a conocerse como Caminito del Rey.
Paraje Natural
El Caminito del Rey se encuentra entre los términos municipales de Ardales, Álora y Antequera. Este paraje natural es, sin duda, uno de los más espectaculares de la sierra malagueña, pues cuenta con grandes paredes escarpadas. Alrededor de este entorno se hallan tres grandes embalses: Conde de Guadalhorce, Guadalhorce y Guadalteba.
Nuestra actividad comienza entrando por Ardales (acceso norte), en el entorno del embalse del Conde de Guadalhorce. Tenemos dos opciones para llegar a la entrada del camino. La primera es más corta y consiste en atravesar un túnel situado antes del restaurante El Kiosko. Este recorrido está iluminado y nos lleva hasta una pista forestal. La segunda opción, y en nuestra opinión la más recomendable, es a través de un sendero señalizado que se encuentra detrás del denominado “Sillón del Rey”. En este sillón, el rey Alfonso XIII firmó la terminación de las obras del embalse Conde de Gualdalhorce. Es fácil de reconocer, pues es un conjunto de dos bancos, un sillón y una mesa de piedra.
Si nos sentamos en él podremos ver la Casa del Conde en la otra orilla, aunque el paso a esta se encuentra cerrado. Si elegimos la segunda opción andaremos unos 2,7 km por un sendero entre los árboles y siguiendo las orillas del río Guadalhorce.
Senderismo
Caminito del Rey
10,4 km
De 3 a 4 horas
Baja (con una condición física normal)
Embalse de Guadalhorce (Ardales) / El Chorro (Álora)
10 €
Una vez que llegamos a la caseta de control (media hora antes de la hora fijada) nos organizan por grupos y nos recogen las entradas. Allí nos dan un casco, por seguridad, y nos explican el recorrido que vamos a encontrar. Nada más empezar podemos ver el embalse de Gaitanejo. Continuamos andando y empezamos a ver unas grandes paredes. Diez minutos después llegamos a la primera pasarela en el desfiladero de los Gaitanejos. Al llegar vemos que es de madera y, si miramos entre los huecos de sus tablas, podemos ver en numerosos tramos el antiguo camino. También se puede percibir la altura a la que nos encontramos, por eso recomendamos que las personas que sufran de vértigo se lo piensen bien antes de ir, puesto que esto no es nada comparado con lo que nos queda por ver.
Nada más salir del desfiladero vemos que, más o menos por la mitad, hay una vía de tren. De hecho, según pasábamos aparece uno y nos saluda con su bocina.
Como vamos recorriendo partes del antiguo camino, podemos ver tramos de cemento alternado con la madera. Ahora el trayecto es a lo largo del valle del Hoyo, un agradable paseo que nos permite disfrutar de las vistas del desfiladero de los Gaitanes. Casi al final del valle se puede ver una casa en ruinas que tiene el acceso cortado.
Por todo lo alto
Estamos en la parte final del recorrido y al asomarnos a la pasarela vemos que la altura empieza a ser considerable. Volvemos a encontrarnos las vías del tren entre sus rocas y un antiguo puente. Según avanzamos podemos ver el contraste entre el viejo y el nuevo camino y, una vez más, nos asombra esta antigua construcción y las condiciones en las que se encontraba. No tenía más de un metro de anchura y carecía de barandilla. En algunas zonas incluso podemos ver únicamente la viga que soportaba el camino. El deterioro que ha ido sufriendo es visible y, aun así, numerosos excursionistas lo recorrían en el pasado.
Llegamos ahora a un balcón de cristal, desde el que se puede ver el antiguo puente por donde pasa el agua. Según avanzamos empieza a diferenciarse la nueva pasarela que está suspendida entre las paredes del desfiladero de Los Gaitanes. En este mismo camino nos encontramos una placa de metacrilato en una de las paredes, protegiendo un fósil, y más adelante —casi llegando al puente— una placa en memoria de unos jóvenes que perdieron la vida aquí. A raíz de este accidente, en el año 2000 se prohibió el acceso al camino.
Por fin llegamos al puente colgante, de 105 metros de altura. Andamos por una plataforma de metal, a través de la que podemos ver con detalle la altura a la que nos encontramos. Impresiona, vaya si impresiona. Después nos queda una parte de pasarela, con numerosas escaleras que pasan por encima de uno de los puentes del tren. Paramos un momento y miramos la pared vertical. Esta zona de escalada es una de las más importantes de Europa.
Ya queda muy poco para finalizar el recorrido. Rápidamente llegamos al pueblo de El Chorro y aquí nos limitamos a esperar el autobús que nos llevará hasta nuestro punto de inicio, puesto que el recorrido es lineal. Hay que recordar que es importante realizar la reserva previa con tiempo, y que cada entrada al Caminito del Rey tiene un coste de 10 euros. A este desembolso hay que añadir 1,55 euros del autobús para hacer el regreso al punto de inicio de esta ruta.
Aunque hemos disfrutado mucho de este impresionante paseo, nos llama la atención tener que pagar por acceder a un entorno natural. Pero, desde luego, merece la pena.
DÓNDE DORMIR
Ardales (Málaga)
952 112 800
Desde 70 € / noche en habitación doble